Lesiones Deportivas
¿Qué es una lesión deportiva?
Se considera lesión deportiva a cualquier accidente que se produce directa o indirectamente a causa de la práctica deportiva. Directamente, significa que se manifiesta en el mismo momento de realizarla (por ejemplo, un esguince), e indirectamente, que aparece al cabo de cierto tiempo, por repetición de microtraumatismos (por ejemplo, una tendinitis).
Según el momento en que se producen, las lesiones pueden clasificarse en 2 tipos:
- Agudas. Macrotraumatismos que son evidente en el mismo momento de producirse la lesión, como un golpe
Crónicas. Microtraumatismos repetidos, que no se manifiestan en el momento de ocurrir la lesión.
En función del tejido que se ve afectado, las lesiones se pueden dividir en musculares, óseas y tendinosas
LESIONES MUSCULARES
suelen producirse en la unión musculotendinosa. En ocasiones se acompañan de la rotura de fibras musculares, que puede ser completa o de gran parte del músculo.
Según su gravedad, las lesiones pueden ser de varios tipos:
- Grado 1: Distensión
Grado 2: Desgarro (se dice que el músculo se desgarra cuando la lesión alcanza el 25% de su longitud en reposo)
Grado 3: Rotura completa
DISTENSIONES MUSCULARES
Se diferencian dos grandes tipos de distensiones: por tracción o por compresión.
Distensión por tracción. Puede ser provocada por:
- Falta de calentamiento. Se produce cuando el músculo se contrae de manera brusca y no está preparado.
Fatiga muscular. Cuando el músculo se rompe por exceso de fatiga tiene su equilibrio iónico alterado, ya que probablemente ha agotado sus reservas de glucógeno en un momento determinado del ejercicio y, al no ser capaz de responder, se produce la rotura.
Contracción accidental. Es rara en un deportista entrenado. Se trata de un contracción brusca, no controlada por el individuo, que provoca la rotura (caso típico de la rotura del tendón de Aquiles.
Deportes explosivos. Son aquellos en los que, en un momento determinado, se requiere una gran potencia muscular.
Distensión por compresión.
Suelen producirse cuando el músculo en contracción es golpeado. Al ser una contusión directa sobre un músculo en contracción, el golpe es muy doloroso, provocando la rotura de fibras musculares
CARACTERISTICAS CLINICAS DE LAS ROTURAS MUSCULARES
Según su gravedad existen 3 tipos diferentes:
- Grado 1 o leve. Se trata de una simple contusión; no hay una manifestación evidente de lesión macroscópica. La tumefacción y el dolor son leves, porque la lesión muscular es pequeña. Se acompaña de una ligera hinchazón y dolor leve en la zona muscular.
Grado 2 o rotura parcial. En este caso hay rotura macroscópica de las fibras musculares. La hinchazón y el dolor son algo mayores, pero al haber rotura de fibras, aparece sangre que provoca la tumefacción
Grado 3 o lesión grave. En este tipo de lesión hay una rotura completa del músculo. La tumefacción es más evidente, puesto que el sangrado y el hematoma son mayores. No se asocia a dolor intenso, debido a que las fibras nerviosas se separan un poco. No obstante, el dolor inicial es probablemente mayor. La función es nula, puesto que el músculo no tiene continuidad. La impotencia muscular será absoluta para el músculo afectado, pero no para el miembro, pues es posible que otros músculos llevan a cabo su función.
HEMATOMA
Se produce cuando un músculo se rompe, se produce la salida de sangre, que deseca los tejidos circundantes y los separa; de esta manera, la sangre se va distribuyendo entre los tejidos cercanos, y una parte de ella persiste debajo de la piel, formando el hematoma a simple vista. Se dividen en 2 tipos:
- Hematoma intramuscular. Solo afecta a un músculo, casi siempre se produce por distensión, ha rotura interfibrilar y la lesión se localiza dentro del músculo. Hay dolor muscular persistente y, como consecuencia de ello, pérdida de la función.
Hematoma extramuscular. Afecta a varios músculos y se localiza en los espacios intermusculares, hay rotura de la fascia muscular y el dolor se localiza algo por encima de donde aparece el hematoma.
DIAGNOSTICO
Se basa en:
- Cuadro clínico. Es fundamental para el diagnóstico.
Radiografías. Sólo son útiles en caso de avulsión (arrancamiento)
Ecografía. Es de gran utilidad
Resonancia magnética. Es ideal por su alta resolución
TRATAMIENTO
- Reposo: Aunque el músculo este parcialmente roto, el reposo es imperativo ante la sospecha de una rotura muscular.
Proceder al enfriamiento de la zona lesionada, con el objeto de frenar el proceso inflamatorio y disminuir el hematoma.
Vendaje compresivo, no utilizar vendaje inextensible
Elevación de la zona afectada. De esta manera llega menos la sangre a la zona y, por tanto, el hematoma es menor.
- Primeras 72 horas. Valoración de la gravedad de la lesión, (exploración clínica y pruebas diagnósticas), si la lesión es leve esta indicado el reposo, pero si es grave debe hospitalizarse al paciente. No masajear la zona lesionada, puede aumentar el hematoma y romper mas la musculatura.
Pasadas las primeras 72 horas. Realizar un diagnóstico preciso, (determinar si es intramuscular o extramuscular, establecer el grado de la lesión y valorar la lesión muscular.
TRATAMIENTO DE LAS LESIONES LEVES
Termoterapia. Se recomiendan 2 opciones:
- Frío durante las primeras 72 horas y después calor. De esta forma, se ayuda a que aumente el metabolismo y se elimina la inflamación con mayor rapidez.
Alternar frío-calor. Los tratamientos de contraste ejercen efecto alternante, que ayuda a movilizar el edema. Se recomienda la aplicación de agua caliente primero y fría después, comenzando con 2 minutos cada una, para ir progresando hasta 4 minutos.
Vendaje funcional. Es un vendaje que descarga un ligamento o un músculo y ayuda a que no trabaje, facilitando de esta manera una rápida recuperación.
Plan de rehabilitación. Debe incluir: (ejercicios estáticos, dinámicos, con límite de movimiento en el dolor, dinámicos con aumento de carga y de elasticidad y coordinación.
TRATAMIENTO DE LAS ROTURAS MUSCULARES COMPLETAS
Estas lesiones deben tratarse con cirugía, puesto que si el músculo no tiene continuidad, no funcionará correctamente. En la intervención se intentará aproximar los extremos musculares para que puedan volver a funcionar. En general se considera que el músculo debe operarse si tiene la mitad de longitud rota.
- Rotura parcial. Se llena con tejido cicatrizal, que no funciona bien como músculo, y se produce fibrosis; si hay varias roturas parciales, la función muscular es aún peor. Estas roturas no suelen operarse; se dejan cicatrizar, como mínimo durante 3 semanas.
Rotura total. Se pueden unir las partes rotas mediante la colocación de un yeso, pero persiste una cantidad excesiva de fibrosis, que impedirá la contracción del músculo, lo ideal es intervenir quirúrgicamente para fijar los músculos.
COMPLICACIONES DE LAS ROTURAS MUSCULARES
- Formación de tejido cicatrizal. Es tejido que no se contrae, por lo que el músculo pierde potencia y capacidad aerobia y anaerobia.
Formación de hueso heterotópico. Si se produce un hematoma en el interior de un músculo y no se cura, puede convertirse progresivamente en calcio y hueso. Esta formación de hueso dentro del propio músculo se confunde a veces con un tumor maligno.